sensual sed de justicia

En un ataque de cordura, liberé mi lengua y...violé al que cree inferiores a las mujeres, lapidé a Ahmadineyad, dejé embarazados a los curas, hice que al hijo de aquél que cree firmemente que no todos merecemos los mismos derechos le fuese arrebatado el corazón por alguien de su mismo sexo...

Ardió la noche...

Y antes de que la gigante roja dictase sus reglas alcancé a Berlusconi y dejé que cien mujeres marcharan sobre él con sus tacones de aguja...

El forense se acercó al cuerpo.

- dígame usted si no es extraño- se quejó el inspector.- agujeros del tamaño de una bala y ni rastro de la artillería...

La esperanza de los muertos reside en la memoria de los vivos.

Si no hacemos el esfuerzo de recordar,

de aprender de los errores del pasado,

de leer entre lineas para descubrir la verdad,

el conformismo arrasará todo cuanto ellos nos dejaron.

Ana Bolizante

...le cuesta encontrar su voz por las mañanas y se deja llover en la ducha hasta despertar. Ana frágil, de piel blanca, vestida de pecas al preparar la cafetera. Ana bulle, mira por la ventana, destruye, se pone algo de ropa y... el café ya está. Droga en sangre, Ana duda, disimula con algo de colorete su inseguridad y deja su rincón con hambre... Ana de pasos firmes, de brillante mirada, de frío bajo un gorro de lana que alguien le trajo de París...

Y en su cabeza las neuronas no encuentran tierra firme,

desorientadas por el sufrimiento de las mujeres en Haiti,

atragantadas por la corrupción del primer mundo y por sus sociedades indiferentes,

maltratadas por la interminable guerra de Somalia,

desangradas como los corazones mejicanos...

Ana entre la gente, Ana nada.

sangre en tu margarita

Silencio sobre Méjico, como silencian las balas los cuerpos.

Mientras solo se maten entre ellos, usando polvo blanco, pólvora o despiadados camellos, mientras el horror se concentre en sus tierras, mientras sigamos sin entender que todos pertenecemos a una misma raza y que un muerto allí, nos mata a todos por dentro, mientras la prensa vaya y venga como marea o decida prestarle atención a la tragedia según sople el viento, la única garantía es que los inocentes seguirán muriendo.

Las muertes de la imaginación

...irremediablemente se muere, daría su vida por sentir cómo se te acelera el pulso cuando él está a punto de besarte, no por el beso sino por uno de tus latidos. Y no, no está en su mano, pero firmaría lo que fuera con tal de que tu mirar le sacase del anonimato...irremediablemente se muere por descubrir quien eres bajo las sábanas, de qué pasta estás hecha cuando sales de casa, a quien te pareces frente al espejo, cómo se dobla tu cuerpo cuando la vida te quiebra, que voz te pone las pilas, la emoción de un recuerdo en tu rostro de porcelana...irremediablemente se muere por descubrir cómo te delatas.

buscaba tacones rojos con que clavar las palabras y...

ya estoy de vuelta.

...el tequila tiene duende...

...que el agua amarre tus ojos a la belleza, que resuene el latido del búfalo más grande en tu cabeza, que en polvo se conviertan tus venas cuando ya no puedas más, que no esperes de un extraño más que su sonrisa, que no te condenes, que contagies tu risa, que no te quede grande el sofá, que te tienten y caigas de pie, que tus ideas se unan a la resistencia, que no se corrompa tu inocencia...que un día te levantes y la noticia sea que el rencor está en peligro de extinción.

sin aliento y con ganas de más.

¿Fracturas o fracciones?

Yo sumo mi vida a tu vida, a su vida, escucho. No me interesa. No me toca su lujosa infancia, su cómodo vivir, su felicidad se me antoja infeliz. A mi me dan alas los que luchan, los que no las tienen todas consigo, los que inventan y no se conforman. Al compás de sus latidos, laten mis tacones.

recetas caseras para un día cualquiera

...Las manos son para acariciar...

...quien se atreva, que las aderece con algún que otro susurro.

De piel, asfalto

Hay ciudades que se quedan dentro; que te secuestran y a la vez te hacen cómplice en el secuestro; que dejan huella a pesar de que seas tú quien las a recorrido a ellas; que te abrigan y te hacen ser más tú. Y cuando dejas que te den la vida, que pasen por ti, que te roce su brisa y escandalice su latido, entonces, solo entonces basta con susurrar su nombre para que reconozcas que al menos hubo un tiempo en que no te sentiste perdido.

Ten paciencia con el mundo, aunque él no la tenga contigo.

En pie con el puño en alto

Hasta esta ciudad no llega el mar, como no llega el abrazo al diferente, la cortesía hacia el agotado o la comprensión al que está a punto de cometer una locura. No se tambalea por las mareas este asfalto, ni se resiente el ladrillo por las sombras de los transeuntes. No se altera, ni se estrena porque parece beberse su sangre la indiferencia, el conformismo y la mundana dejadez de sus gentes. Cada vez hay más fronteras y ya no solo son las que cada uno piensa, sino que se utilizan las leyes como barrera. Esas leyes de las que somos soberanos, que hacen en nuestro nombre los que nos representan, esas que son arma de doble filo y que crees que no te afectan, esas son las que a mi me pesan.

La frontera es el cuerpo, no la tierra. La frontera hace que mi corazón lata a un ritmo diferente del tuyo, que mis ojos quieran descubrirte, que me asombre el color de tu pelo o me enamore tu timidez, que tu lengua conozca todos los idiomas secretos de babel, que me lleves la contraria mientras nos tomamos un café y ya es bastante, con eso ya es bastante.

Es indigno de Francia lo que está haciendo el gobierno de Sarkozy. Es cruel que nos quedemos mirando sin hacer nada, porque por omisión también se puede cometer un crimen.

verdad instantanea

Si, intentamos entenderlo todo.

un

déjà vu.

Lo reconozco, no podemos entenderlo todo.

Tú, yo y nuestra gigante roja.

Que entre la vergüenza

¿A donde va esa gente, esa a la que echamos de nuestras tierras? ¿es que acaso alguna vez fueron nuestras?, ¿a donde van?...¿acaso nos pertenece el polvo, la gavilla que arrastramos, la ceniza que sembramos al arrasar, el aire, el pedazo de cielo que nos entra por los ojos, la sal del mar que se quedó con nuestra piel, los sonidos que oímos o que nuestra memoria cree recordar?...Ilegales deberían ser nuestros actos y no las personas. Ilegal debería ser desalojar casas de cartón y chapa porque hacen feo el paisaje, quedan mal. ¿Y nosotros, cómo quedamos al expulsar a los gitanos, tengan hijos, personas mayores o discapacitados a su cargo?...Ilegal debería de ser no ayudar al otro, creer que viene a robarte el pan y la alegría...Pero aquí la palabra no basta, se los llevan, sean de la nacionalidad que sean, se los llevan.

Me duele Francia en manos de Sarkozy,

me duele Italia en manos de Berlusconi,

me duelen los estados de América que quieren convertir la inmigración ilegal en delito.

Gritos

No se que hago aquí. No pertenezco a este lugar, dime que no...¡dime que no soy como ellos!...Con la boca hablan de paz y con sus manos fabrican bombas. ¿Tu lo entiendes?...la misma sangre les da vida y tanta es la derramada, que los verdugos ya no se distinguen de las víctimas...tengo un agujero aquí...un agujero en el alma...que no se va, no se llena, no se emborracha...¡Necesito descansar!...Se que tengo su piel, sus párpados y hasta sus gestos pero no puede ser...No buscan el amor, buscan enamorar y atar...si supieras de lo que son capaces para alcanzar el poder...

Una revolución nada silenciosa...

Vivan las mujeres con carácter, las que parecen tener el corazón de león, las que vencen sus miedos, las de pelo sedoso que luchan por lo que quieren, las que muerden si las hieren, las que se emocionan al atardecer, las que poseen ese sexto sentido que las hace mujer.

Roja es la palabra que la mujer inventa,

porque nace de la pasión y a todos alimenta

y no hay mayor acto de cobardía,

que empeñarse en domesticarla.

...instantes...

La rueda del tiempo, una carretera, tu nombre en mis labios, el sonido de la madera jugándose la vida en la chimenea...una persiana promocionada para un ascenso, bajar y subir escaleras, tus piernas, el ruido del metro, tu olor a la hora de la siesta, los ojos de la Dietrich, el cable del teléfono, pájaros que arden, se acabó la escuela...el bote de pastillas esperando que le atiendas, un cigarro mal apagado, el norte, el sur, todas las horas muertas, el azar, el quejido de las cuerdas al recibir el peso del nokeado, la décima de segundo, el sidecar, la marea...el ladrón, la prostituta, una quimera, los celos, la dependienta que coquetea, tus sueños, mis manías, las peleas, el sol incordiando, el piano guerrero, un día en La Tierra.

a otro con ese cuento

Si solo se tratara de media naranja, sería fácil...

...si alguien ha visto a mi medio limón, que me lo diga.

Sonrojarse una vez al día es síntoma de buena salud.

a/parte

Te descalzas. Abres el grifo y dejas que el agua haga lo que mejor sabe hacer. La ropa te abandona o quizás seas tú quien la de por perdida al dejar que se suicide contra las baldosas.

Ahora solo te tienes a ti. Eres piel, agua, esponja, vaho, vacío...

Ya estás fuera del alcance de las groserías de tu jefe, del mal humor de los civilizados, de la violencia de la vida... El mundo de los otros, ese en el que te ves obligada a vivir por fin se ha quedado fuera.

y la verdad...

Se clava

simplifica

ayuda

duele

sale por la boca

entra por los ojos

hace que te rindas ante ella

conmueve

salva

hace estremecer

es buena para la piel

provoca

la esconden

la tapan

da vida

es temida

se come al que cree estar por encima,

no tiembla

no titubea

no duda,

vence al final, aunque ya no haya espectadores en el combate y los espectros sean los únicos que la aguarden.

...de parte del arte: no te conformes nunca.

que te susurren verdades

Los románticos del siglo XXI son como los peces,

muchos están en la red.